Sobre el divorcio en la Biblia

Deuteronomio 24:1-5

Cuando alguno tomare mujer y se casare con ella, si no le agradare por haber hallado en ella alguna cosa indecente, le escribirá carta de divorcio, y se la entregará en su mano, y la despedirá de su casa. Y salida de su casa, podrá ir y casarse con otro hombre. Pero si la aborreciere este último, y le escribiere carta de divorcio, y se la entregare en su mano, y la despidiere de su casa; o si hubiere muerto el postrer hombre que la tomó por mujer, no podrá su primer marido, que la despidió, volverla a tomar para que sea su mujer, después que fue envilecida; porque es abominación delante de Jehová, y no has de pervertir la tierra que Jehová tu Dios te da por heredad. Cuando alguno fuere recién casado, no saldrá a la guerra, ni en ninguna cosa se le ocupará; libre estará en su casa por un año, para alegrar a la mujer que tomó.

Esa lectura bíblica se refiere al algo de tiempos antiguos, del pasado, que no se debe tomar en cuenta ¿o sí? Dios es un Dios de justicia pero también de misericordia. Dios es un Dios de misericordia pero también de justicia. por lo tanto, al aplicar la justicia no puede faltar la misericordia, como tampoco debe faltar la justicia al aplicar la misericordia.

Muchas injusticas se han cometido en las iglesias en torno al tema del divorcio y el recasamiento, esto es porque antes de decidir u opinar, no se han arrodillado a pedir dirección de Dios y su respectiva comprobación.